Hace unos días estaba hablando con mi señora madre que necesitaba unos pantalones pirata y que iba a aprovechar las rebajas (aprovechar, aprovechar, más bien entrar el la tienda "eNesima" vestida de exploradora y rebuscar en un millón de percheros hasta encontrar algo de mi talla).
-¡Ah! ¿y te los vas a comprar tan largos?
-¿Perdón?- es una manía que he cogido, que suena más neutro que ¿que me estás contando habitual?
-Los pirata son los que te quedan más arriba del tobillo, como cuatro dedos o así-
-No, Mamá eso son los corsario- (o lo que yo pensaba que eran, Internet no me ha dado solución).
-Si es que ya estáis cambiándole el nombre a las cosas, ¿que me queréis marear?-
(Si, Madre, hay una conjura judeo-masonica-maxista-lenista para volverte loca)
Días después... a gritos desde el salón:
-¿Has visto las manoletinas que me he comprado?-
-¿Perdón?-
-Si, estás manoletinas azules que me he comprado-
-Si, las manoletinas estas-
Voy al salón, escuchando todavía a Colby y a la tal Sara.
-Mira, mira, ¿a que son monas?-dijo metiéndomelas bajo la nariz
-¡Ah! las bailarinas-dije sin pensármelo mucho, en mi estado atontado creía que se había comprado dos Manuelas pequeñitas de color azul: ¿para que quería dos pechos más?, demás azules, ¿estaba pensando en convertirse en Pitufa o en un personaje de Avatar?
-Bailarinas, como que bailarinas, ¿pero es que seguís cambiado de nombres?, se llaman manoletinas por Manolete, no bailarinas. Si es que me queréis volver loca...- -No es eso, es que en todas las revistas y demás las llaman bailarinas, me he despistado-
-Tú no te despistas, quieres demostrar que sabes más que yo-
-Bueno, son muy bonitas-
-Está manía que os dado...-
-Lo mismo lo de Manoletinas es marca registrada, como los donuts que no son de marca Donuts se llaman berlinas ahora-
-Loca, si es que me queréis volver, loca, si las cosas se han llamado siempre de una forma ¿por que cambiarlo?
-¡Halá! Si, son preciosas, que las disfrutes con salud, que me vuelvo a mi curso-
-Como no te doy la razón te largas, ¿no?